Siempre hemos estado luchando para ser los mejores, para ser perfectos para esa persona, para que nos quiera. ¿Y qué conseguimos a cambio? Nada. Nos arrastramos, nos esforzamos pero desgraciadamente a veces no se consigue y te quedas llorando, sin aliento. Preguntandote que es lo que hiciste mal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario